14.5.08

No quiero arrancarle las piernas -dijo mientras pitaba una vez más su cigarro- porque no da crucificarlo antes de tiempo, todavía tiene toda una vida para resarcirse de lo que dijo. Uno se equivoca, ¿viste? ¿Cuándo alguno que otro no dijo algo que no debía, miró al culo de la mina equivocada o pasó un semáforo rojo en distracción? No podemos hacernos cargo de que somos perfectos, entonces tampoco puedo yo ser quien critique y le clave a éste nazareno callejero los clavos en las manos. Porque yo no soy ningún romano como aquel tampoco fue ningún rey.
Pero vamos a ser sinceros, porque quizás éste no sea ningún nazareno, quizás sea más Judas de lo que parece. Detrás de su barba y su pelo largo esconde alguna gambeta, alguna tramoya de esas medio extrañas. Y ahora que lo pienso ¿no tenía Judas también barba y pelo largo?
En verdad no me acuerdo. Si no voy a catequesis desde que tengo 12 años... ni idea. Pero me da esa sensación. Porque viste como son las modas... uno empieza a fumar y del grupo de amigos todos empiezan a fumar a la misma edad, a vestirse con la misma ropa. Siempre hay uno que va marcando la moda... la "tendencia" como le dicen en las revistas que lee mi mujer. Bueno, ponele que es alguien que sea medio líder y en éste caso Jesús era medio lider de esos 12 tipos... entonces estaban los otros haciendo lo que hacía éste Jesús. Él predicaba, los otros predicaban; él se dejaba la barba, los otros se dejaban la barba. Eso sí cuando al otro se le ocurrió entregarse para que lo clavaran, ahí sólo unos pocos se bajaron los pantalones y dejaron que también les metieran el clavo por el orto. Pero bueno, siempre hay cagones y hasta en los calzoncillos del más fiero hay un poquito de caca en la situación que menos se te ocurra. Una vez vi un especial en la tele que hablaba de una molécula de caca que le sale a cualquier persona, como de transpiración, de adrenalina en cualquier situación. Por cuestiones de vértigo... el famoso "vértigo en la cola", ¿no? -Risas-.
Bueno, en verdad no puedo crucificarlo, no puedo decirle nada. Pero qué fiero estuvo cuando dijo eso la otra tarde... que irrespetuoso che.

Minutas de charlas.

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